Por: Yaelie Cuadra Flechas, MSW MPsy
Lic en Consejería. Psicológica y Trabajadora Social Clínica
Tel. Oficina: 787-612-7997
Todas las personas experimentamos situaciones que nos generan estrés. No escuchar la alarma sonar en las mañanas, el tapón, las asignaciones, noticias, situaciones familiares, etc. Todo esto provoca el aumento del cortisol. Esta hormona se crea en la parte superior de los riñones, y reacciona ante eventos estresantes, al igual que la adrenalina.
Cuando nos enfrentamos a uno de estos eventos, el cortisol aumenta y nos ayuda a reaccionar. El cortisol regula la producción de la azúcar, la presión sanguínea, los patrones del sueño, contribuye a la memoria y concentración. ¿Pero qué pasa si una vez aumenta no logramos que baje? ¿Qué pasa, si nos encontramos en un estado de alerta constante, donde el cuerpo continue liberando cortisol?
Lamentablemente podemos experimentar alteraciones en nuestro sistema digestivo, reproductor y de crecimiento. Esto quiere decir que si no mantenemos los niveles de cortisol controlados podemos experimentar situaciones emocionales, problemas digestivos, dolores de cabeza, problemas cardiacos, aumento de peso, pobre concentración y memoria.
No podemos evitar enfrentarnos a estas situaciones ya que son parte de la vida, lo que si podemos es enfocarnos en lograr disminuir los niveles de cortisol para evitar las complicaciones tanto físicas como emocionales. ¿Cómo podemos lograrlo? La receta es bastante sencilla, pero solemos resistirnos a ella:
Llevar una alimentación balanceada.
Tratar de evitar el consumo de grasas, azucares y alcohol en exceso.
Actividad física, con esto no quiero decir que se tiene que matricular en un gimnasio, pero sí moverse. Intente estacionar su auto un poco mas lejos, use las escaleras en lugar del elevador y si trabaja muchas horas sentado/a levántese de vez en cuando.
Busque pasatiempos que le ayuden a distraerse y a mantener su mente ocupada en cosas positivas. También es importante el descanso. Puede intentar técnicas de relajación y meditación e incluso el utilizar alternativas naturales como lo son los teses para fomentar el sueño.
Por último, pero no menos importante, busque ayuda. Cuando sentimos que las cosas están fuera de nuestro control y no encontramos alternativas viables para lidiar con estas podemos recurrir a una persona que nos escuche y nos ayude a encontrar esas alternativas.
A veces solo necesitamos quejarnos, llorar, hablar y/o gritar para soltar las situaciones y seguir adelante.