Por: Nélida Norat
Asistente Terapia Física
RPTA 1690
PTA 014037
La artritis es una condición inflamatoria que afecta a muchas personas. La inflamación puede ser dolorosa, especialmente a la hora de levantarte en la mañana y puede prolongarse si estás inactivo. Hay personas que sienten cansancio y debilidad. Hay múltiples tratamientos para ayudar a aliviar esta condición, tales como: Medicamentos recetados por tu doctor, medicina natural y terapia física. Hoy quiero platicarte desde mi punto de vista como asistente de terapia física.
Cuando un paciente llega a la clínica, buscamos alternativas para ayudarlos a disminuir la inflamación y el dolor a través de ejercicios, estiramientos y hasta terapia acuática. Otra alternativa son los masajes terapéuticos. Éstos son una gran parte de la terapia física para ayudar a los pacientes con sus dolores e inflamación.
Aquí les dejo algunas alternativas que pueden realizar en casa. Pueden comenzar con ejercicios de estiramiento. Pueden estirar su cuerpo por lo menos 2 veces al día, comenzando desde el cuello hasta la punta de los pies. Si tienen en casa un “heating pad” úsenlo varias veces en un día por lo menos 20 minutos para disminuir el dolor y la inflamación.
Bailar, nadar y yoga son excelentes ejercicios para ti. También puedes correr bicicleta, una caminata corta, usar una bicicleta estacionaria o elíptica. Mantenerse en movimiento es la mejor respuesta a cada uno de nuestros dolores. Cuando nos movemos, aumentamos la circulación, disminuimos la inflamación y oxigenamos nuestro cuerpo. La palabra clave para disminuir el dolor e inflamación es “movimiento”.
Por último, les dejo unos ejercicios que pueden poner en práctica en su hogar:
- Estirar cuello con movimientos circulares, mirar hacia los lados, poner tu cabeza en posición hacia tu hombro.
- Levantar tus brazos, doblar codos ”biceps curls”.
- Con tu mano puesta estirar las muñecas con movimientos hacia arriba y hacia abajo. Luego cambiar de lado. Y estirar tus dedos también con tu mano opuesta.
- Realizar rotaciones de tronco en movimientos lentos.
- Hacer marcha en el mismo lugar de pie. Si tienes mucho dolor o problemas de balance puedes hacerlo sentado.
- Sentado subir y bajar los tobillos y también realizar movimientos circulares hacia un lado y luego hacia el otro.
- Puedes estirar tus pantorrillas (batatas) con bandas elásticas o de pie levantando los talones y las puntas de los pies. Puedes realizar ambos ejercicios.
Puedes realizar estos ejercicios por lo menos dos veces al día por unas cinco a diez repeticiones.
Nadie mejor que tú para conocer tu cuerpo y sus reacciones al ejercicio. Por eso te recomiendo que escuches tu cuerpo. Si día no puedes realizar tu ejercicio, no hay problema; descansa y retomas al otro día. El descanso también es importante para ayudarnos a disminuir la inflamación y el dolor.
Mantenga una dieta balanceada con alimentos antiflamatorios y como siempre les digo, “a mover el esqueleto”.
