Después de los 55 años, la salud oral adquiere cierto protagonismo, basado en la preocupación natural de la posible pérdida de piezas dentales. La buena noticia es que los profesionales de la odontología coinciden en 10 aspectos o consejos, que, aplicados de manera consciente y consistente, prometen mantener una dentadura saludable en esta etapa de la vida.
1. Cepillado dos veces al día:
Sí, eso quizás ya lo sabías. Pero lo que quizás no sabes la técnica de cepillado es esencial para eliminar la placa bacteriana y prevenir caries y enfermedades de las encías. Asegúrate de usar un cepillo de cerdas suaves y realiza movimientos circulares en cada diente.
2. Toma en serio el hilo dental:
A medida que envejecemos, los espacios entre los dientes tienden a aumentar, lo que facilita la acumulación de restos de alimentos y placa. El uso de hilo dental al menos una vez al día ayuda a limpiar estas áreas difíciles y reduce el riesgo de enfermedades periodontales.
3. Enjuague bucal:
Un enjuague bucal antibacteriano puede reducir las bacterias en la boca y ayudar a prevenir enfermedades de las encías. Según estudios, el enjuague con clorhexidina (bajo supervisión del dentista) es efectivo para mantener una buena salud gingival en personas mayores.
4. Dieta rica en nutrientes esenciales para los dientes:
Consumir alimentos ricos en calcio, vitamina D, y fósforo es importante para la salud dental. Estos nutrientes fortalecen los dientes y los huesos que los sostienen. Productos lácteos, verduras de hoja verde y pescado son buenas fuentes.
5. Hidratación para prevenir la sequedad bucal:
La sequedad bucal (xerostomía) es común en personas mayores, especialmente en quienes toman ciertos medicamentos. Esta condición puede aumentar el riesgo de caries. Beber agua regularmente y usar sustitutos de saliva ayudan a mantener la boca húmeda y proteger los dientes.
6. Visitas al dentista (Al menos cada seis meses):
Las revisiones regulares permiten detectar problemas en sus primeras etapas. El dentista puede realizar limpiezas profundas, aplicar flúor y ofrecer tratamientos preventivos. Las personas mayores pueden beneficiarse de chequeos más frecuentes para monitorear condiciones específicas de su edad.
7. Uso de cepillo interdental o irrigador bucal:
Los cepillos interdentales y los irrigadores bucales son herramientas útiles para limpiar los espacios entre los dientes y en la línea de las encías. Estas herramientas pueden ser más cómodas y efectivas para personas mayores que luchan con el uso del hilo dental.
8. Evitar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol:
El tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol están asociados con un mayor riesgo de enfermedades periodontales y cáncer oral. Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol ayudan a mejorar la salud bucal y reducir el riesgo de pérdida dental.
9. Tratar la enfermedad periodontal tempranamente:
La enfermedad periodontal es una de las principales causas de pérdida de dientes en adultos mayores. Es importante tratar cualquier signo de gingivitis (inflamación de las encías) lo antes posible para evitar que avance a periodontitis, una forma más severa de la enfermedad.
10. Considerar suplementos de calcio y vitamina D:
La salud ósea es fundamental para mantener los dientes firmemente sujetos en el hueso. La osteoporosis puede debilitar el soporte de los dientes, especialmente en mujeres posmenopáusicas. Consultar con el médico sobre suplementos de calcio y vitamina D puede ayudar a mejorar la densidad ósea y, por ende, la salud dental.